Hay una razón por la cual,
a pesar de tener más avances científicos y tecnológicos que nunca para mejorar nuestras vidas,
los índices de estrés, ansiedad y sobrepeso cada vez son mayores.
¿Por qué?
Muy simple, por la naturaleza humana.
¿Es que la naturaleza humana es mala?
Por supuesto que no, ni mucho menos.
La naturaleza humana no es buena ni mala.
La naturaleza humana es la que es. Y no se puede cambiar.
Es muy importante entender y respetar esto. Extremadamente importante.
Entender y respetar.
¿Pues los avances científicos y tecnológicos son malos?
¡Qué va! Al contrario. La mayoría han mejorado nuestra calidad de vida y longevidad.
¿Entonces? ¿Por qué cada vez vivimos con más estrés, ansiedad y sobrepeso? ¿Qué es lo malo?
Pues nada. Malo no hay nada.
Es simplemente por una cuestión de expectativas.
¿Cómo?
Mira.
Es muy sencillo.
La raza humana evolucionó durante millones de años desarrollando, muy progresivamente, una genética con una serie de instintos que nos permitieron adaptarnos al medio, sobrevivir, y prosperar como especie.
Lo que pasa es que nuestro entorno en 50 años ha cambiado radicalmente, pero nuestros genes son los mismos que hace 20mil.
Este “pequeño” matiz marca la diferencia.
Nuestros genes están adaptados a un entorno salvaje y de escasez, donde nuestros instintos nos ayudaban a sobrevivir y prosperar.
Ahora, en un entorno de confort, abundancia y comodidades, si nos dejamos llevar por nuestros instintos… pues eso: Estrés, ansiedad y sobrepeso… como mínimo…
Lo dicho, cuestión de expectativas: Nuestros genes esperan una cosa, pero nuestro entorno nos ofrece otra.
Vaya, ¿entonces lo malo son nuestros genes e instintos?
Qué manía en buscar culpables…
No.
Nuestros instintos no son malos.
Solo hay que entender en qué contexto fueron desarrollados… y en qué situaciones es recomendable dejarse llevar por ellos, y en cuáles, es mejor controlarlos desde la razón.
Lo que te decía al principio.
Entender y respetar.
Solo eso. Todo eso.
Y es por eso que hablamos de “comodones e indomables”.
Mira.
Es de comodones no reflexionar y dejarse llevar siempre por nuestros instintos, viviendo a merced de la inercia del entorno… y utilizar las quejas y las excusas para justificar los problemas modernos que sufrimos (estrés, ansiedad, sobrepeso, etc…).
Y es de indomables ser conscientes de ello; y reflexionar para encontrar el equilibrio entre nuestros impulsos instintivos y las acciones que le convienen a nuestro CuerpoyMente.
Una vez se entiende esto, es mucho más simple forjar unos hábitos alineados con las necesidades de la naturaleza humana.
Aunque eso de forjar hábitos no es tarea fácil.
Es simple, pero no fácil. No es lo mismo.
Para ello ayuda mucho reflexionar un poquito cada día con el enfoque adecuado y sentirse acompañado de personas que también están interesadas en ello.
En caso de interés, escribo por correo a mi lista con pequeños tips para ‘entender y respetar’ la naturaleza humana en el contexto actual,
y aprender a ser un poco más indomables, y menos comodones.
*Por cierto, soy Coach Galo, encantado.
–> Apuntarse a esta curiosa lista de ‘entender y respetar’ es simple y gratis. Y desapuntarse también.
Es aquí, justo debajo.